Lugar de origen: Reino de Kush, actual Sudán
Fechas: siglo I a. C.
El reino de Kush, situado a lo largo del río Nilo, fue una región muy importante durante el periodo de máximo esplendor de las civilizaciones griega, romana y sobre todo egipcia. Una zona con abundantes materias primas como el oro y que vio florecer a un reino que fue próspero durante largos siglos. Los egipcios, vecinos por el norte, llamaban a esta zona Ta-Seti, la "Tierra de los arcos" pues sus arqueros eran famosos por su destreza. Y este excelente manejo del arco se extendía también a las mujeres. Egipto obviamente, siempre se sintió atraído por esta zona, así que ésta fue invadida y recuperada por sus habitantes en varias ocasiones a lo largo de su dilatada historia.
Y durante mucho tiempo este reino estuvo gobernado por mujeres. Las denominadas kandake.
De estas reinas se sabe más bien poco pero debieron tener las funciones típicas de sus homólogos masculinos, sin embargo debido a la escases de fuentes propias (1), casi todo lo que sabemos de ellas nos llega a través de sus enemigos: los romanos. De Amanirena, Dion Casio (s. II) dice de ella que era: una especie de mujer muy masculina y ciega de un ojo. También el historiador Estrabón en su obra Geographica (23 a.C.) habla de Amanirena como una Kandake tuerta.
Gracias a Estrabón también sabemos que en el siglo I Amanirena, lideró a las tropas kushitas y que atacó la ciudad de Syene (actual Asuán) que en la época dependía del Imperio Romano. Sabemos también cuales fueron las consecuencias y es que el emperador Augusto destruyó la ciudad de Napata como represalia. No olvidemos que Augusto acababa de conquistar Egipto tras luchar contra Marco Antonio y Cleopatra en la batalla de Actium y toda la zona era en ese momento, la más reciente provincia romana. Esto significa que África en aquel momento, tenía al menos dos reinas muy importantes y poderosas: Cleopatra y Amanirenas.
El ejército del reino de Kush luchó contra ni más ni menos, que el ejército de Roma y en un principio su ataque, que según se dice, fue rápido y contundente, tuvo efecto positivo para nuestra protagonista. Llegó a conquistar varias ciudades y sus tropas desfiguraron y robaron gran cantidad de esculturas romanas. Se cuenta de hecho, que esta kandake mandó enterrar bajo las escaleras de un templo en Meroe, la capital kushita, un busto del propio emperador Augusto (2). Probablemente la intención de colocar este busto en las escaleras de entrada cumplía una función simbólica: todo el mundo que entrase al templo pisotearía a su enemigo. Este castigo simbólico lo podemos ver en numerosas culturas a lo largo y ancho del mundo.
Finalmente y tras varios encuentros bélicos se firmó la paz entre Roma y Kush. Un acuerdo muy beneficioso para estos últimos y el reino de Kush seguirá existiendo durante varios siglos.
Poco más se conoce de Amanirena, y poco más se ha estudiado de las otras kandake. Sin embargo, incluso en la Biblia aparecen estas reinas, dándose un error común en casi todas las fuentes, el de confundir el título de Kandaké (equivalente a reina) con el nombre propio de la monarca: Y había un etíope, un eunuco , funcionario de la corte de Candace, reina de los etíopes, que estaba a cargo de todo su tesoro. Siglos más tarde, el teólogo y padre de la Reforma, Calvino (s.XVI), en sus Comentarios Bíblicos, corrige el error: El nombre Candace no era el nombre de una sola reina; pero como todos los emperadores de Roma se llamaban Césares, los etíopes, (...) llamaban a sus reinas Candaces. (...) informa que las mujeres solían reinar allí.
Esta es lo que sabemos o al menos lo que he podido encontrar de Amanirena, una kandake casi desconocida, poderosa, que lucho y ¿venció? al Imperio Romano. Una figura que desde luego no merece permanecer más tiempo engrosando la lista de las... CASI OLVIDADAS.
+ INFO: ARTS&CULTURE, WIKIPEDIA, EGIPTOLOGÍA.COM, UROSARIO,
(1) En el caso concreto de Amanirena sí que hay al menos una fuente propia que la nombra, la Estela Meroítica de Hamadab
(2) Este busto está en la actualidad en el Museo Británico de Londres y es conocido como La Cabeza de Meroe.
Curiosa la existencia de Amanirena, desde luego que no había oído hablar nunca de ella; Cleopatra es admirada, pero en los documentales, libros de historia, etc., se olvidan de nombrar al resto de mujeres... Gracias por hacerlo tú, y gracias por aumentar nuestros conocimientos y nuestra cultura. A la espera de tu siguiente post, te felicito por tu gran trabajo.
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